
La edición que estoy leyendo es de 2004.

El prólogo, a cargo de Luis Claramun,t se puede leer en: http://www.espacioluke.com/2004/Junio2004/lezama.html
Hasta ahora sólo he leído unas 50 páginas (son más de 300) pero ya he encontrado las siguientes similitudes entre el libro y el álbum:
En Mascatte estaba la factoría francesa del señor Dieu, que tenía tratos comerciales con el sultán independiente. El señor Dieu importaba armas llegadas de Bélgica, y la presencia de dicho comerciante concedía una apariencia de legalidad a las exportaciones de Djibouti.
Los ingleses no se dejaron engañar. Compraron la factoría del señor Dieu y la clausuraron.
El gobernador Pascal no aceptó la derrota. Siguió autorizando las exportaciones, siempre que como único destino tuvieran el mar. Es decir, el barco que zarpaba no recibía ningún documento de navegación por parte de la administración ni ninguna confirmación de la aduana.
Un carpintero árabe cepillaba cuidadosamente las cajas para que no quedara una sola marca comprometedora.

Yo sólo tenía un butre (nombre genérico de los barcos indígenas), es decir, un pequeño velero como los que tienen los pescadores de perlas del Mar Rojo. Pero era joven y estaba lleno de ilusiones.

Recluté enseguida una tripulación a mi gusto: dos marineros somalíes (Ahmed y Abdi) y un grumete minúsculo.

Es un viejo duro de pelar, color regaliz, al que le cruzan el rostro unos enormes mostachos blancos.

La web oficial sobre Henry de Monfreid: http://www.henrydemonfreid.com/
Hasta pronto