Bueno, bien que el hilo haya servido para generar debate, así es más entretenido.
Scardanelli:
Lo de los colores me parece mera cuestión de gusto. Entiendo que una acuarela hecha a mano tiene un atractivo muy especial, pero es verdad que también hay cosas hechas infográficamente que son auténticas maravillas, también depende mucho de la estética en cuestión. En este caso de Rodier me imagino que los colores son lo menos representativo, pues si el proyecto hubiera salido a la luz posiblemente de ese apartado se encargaría uno o varios coloristas.
Scardanelli wrote:A mí, y llamadme blasfemo por rajar de una leyenda de la BD, los cómics en solitario de Bob de Moor me parecen infumables, ya sean barellis, coris o algunas planchas de Pícaros. Así que si el original me parece horroroso, de los Rodieres e imitadores ya ni os cuento. La BD me parece un género sobrevaloradisimo, y es solo mi opinión que no pretende buscar polemica. Hay una docena de obras maestras y el resto me parece una milonga revestida de lujo. Me quedo con el cómic americano sin dudarlo un segundo, y con el cine tres cuartos de lo mismo.

Hala lo que ha dicho

. Por partes:
A mí Bob de Moor como dibujante sí me gusta. Pero reconozco que, hasta donde le he leído, no me parece alguien con capacidad como para funcionar de manera "autónoma", al menos no a un primer nivel. Me explico: los dibujos su Isla Negra me parecen muy bonitos y detallados, pero como tu mismo analizas (no recuerdo ahora si en tu blog o aquí en el foro) para la historia que se cuenta funcionan mejor cualquiera de las versiones de Hergé. Y con todo, en la Isla Negra es verdad que funciona bien porque los encuadres son en su mayoría los de Hergé (y ahí es donde Bob de Moor patina). Barellis he leído tres, aunque reconozco que en diagonal, porque lo que ahí falla es el guión, que es un infumable encadenado de gags, a veces con gracia a veces sin ella.
En lo que ya no estoy de acuerdo ni de lejos es en que la BD sea un género sobrevaloradísimo (por otra parte de cualquier movimiento artístico puede decirse que hay una serie de nombres icónicos y luego muchos segundas, terceras y octavas filas) y que sea mejor el cómic americano. Pues depende de qué BD coja uno y depende de qué cómic americano. A mí todo el rollo que se traen con los superhéroes me interesa en general entre poco y nada. Me gusta el Frank Miller como dibujante en Sin City, pero lo cierto es que sus guiones, visto uno, vistos todos. Otra cosa es el underground, de Robert Crumb he leído algunas cosas y sí que me han gustado, y por supuesto me encanta Maus de Art Spiegelman y también sus obras juveniles, recopiladas en Breakdowns, que me parecen brutales. De Will Eisner he leído La Conspiración, obra de madurez, y me encantó (aunque ya no es propiamente un cómic) pero intenté hincarle el diente a The Spirit, que tanta fama tiene y no pude pasar de la segunda hoja, me pareció infumable. No tengo la cultura comiquera que otros manejáis por aquí, pero si uno coge a autores como Chaland o Bravo, dentro de la influencia de la línea clara, me parecen autores de primerísimo nivel, que, aunque tengan sus lógicas influencias, no son epígonos de nadie. Y en otras tendencias que también se engloban en la BD hay también cosas de mucha calidad, no voy a extenderme en ello, pero sirva citar al fallecido Moebius.
Con el cine pasa exactamente lo mismo. Estados Unidos es verdad que tiene una industria que como tal funciona muy bien, y que ciertamente producen cosas muy buenas, pero también mucha basura. Y no es menos cierto que aunque aquí se hayan hecho bodrios como Los Bingueros

algunos de los considerados mejores directores de todos los tiempos son europeos (Buñuel, Bergman, Fellini, Lang) y la mayoría de las corrientes más experimentales que se salen del modelo de cine clásico, que está muy bien para lo que lo está, también lo son.
nowhereman:
nowhereman wrote:
No soy filósofo ni tengo nociones de filosofía mas allá de las dos cosillas que aprendí en el Instituto, y eso fue el siglo pasado. Tampoco se mucho de arte (ni de nada), pero como he defendido aquí siempre, para mi la obra de Hergé es arte y partiendo de eso, cualquier obra de arte puede llegarte o no, pero tiene unas virtudes objetivas. Luego siempre ha habido en la historia, aprendices que han igualado técnicamente a sus maestros e incluso a quienes han superado (siguiendo su propio camino de creación, claro está). También ha habido grandes copistas que han ejecutado réplicas de una perfección increíble. Nada de eso se da en mi modesta opinión aquí, ni por asomo.
Sobre el valor artístico intrínseco de la obra de Hergé yo también lo defiendo siempre. El cómic, al igual que el cine, funciona como una industria, pero Tintín, aun cuando sus orígenes y su desarrollo se produjo en ese contexto, tiene un "algo mas" que trasciende todo eso. Obviamente ese "algo mas" no lo alcanzan los pastiches de Rodier (ni se le puede pedir tampoco) pero aquí, creo, hablamos de una obra que sería un homenaje simpático o como tal lo tomo yo (igual soy yo el equivocado).
nowhereman wrote:El ejemplo más claro es en mi opinión la famosa plancha bidón. Técnicamente impecable, pero carente de alma, de ese "alma" que sólo puede dar el artista a su creación. Pero es que en este caso no es tampoco ni muchísimo menos, eso... muy lejos de ser técnicamente buena, yo lo veo un pegote, lo siento (Con todos mis respetos para el Sr. Rodier y para vosotros ¡Faltaría más!, me reservo el derecho de que no me guste su trabajo) No es sólo el tratamiento digital y del color (coincido 100x100 con Scardanelli). Esos trazos, esos rostros, esas posturas, esos movimientos, esas...

Hombre, a ver, no es Hergé ni por asomo, eso está claro. Es verdad que le falta vida, le falta naturalidad, el sentido del movimiento hergeano, incluso su elegancia, cierto que no creo que Hergé dibujara así a Haddock sin barba o a Chester siempre enfadado que parece que le deben y no le pagan

, y se nota en definitiva que es alguien que está imitando un estilo y no hablando con voz propia (quizás esto es lo más grave que se pueda achacar a dibujantes como Rodier o Régric). Pero, dicho eso, tampoco está tan mal, hombre, los dibujos son bonitos y creo que correctos y aunque no colarían por originales de Hergé tampoco es que sean precisamente una chapuza, que en todo hay grados.
Y en cuanto al cambio de herramientas y su influencia en el arte, creo que es algo que pasa en cada generación de artistas. La cuestión es esa, encontrar su "voz" con las nuevas herramientas.