

Editado por Zendrera Zariquiey en 2003, está dirigido a niños y trata de enseñarlos a dibujar cómics. Trae algunos detalles interesantes, como un estudio de las proporciones de los principales personajes de Hergé, o de las expresiones que pueden adoptar, así como sobre las posturas y otras cuestiones interesantes.
En resumen, me parece que si bien no es desde luego un libro imprescindible, sí tiene un cierto interés sobre todo si te gusta dibujar. Sin duda un buen regalo para un niño que tenga esa afición.
Hasta pronto