Post
by zafiret » 19 Jun 2011, 14:35
-Capitán... ¡qué casualidad!
-No es ninguna casualidad, Tintín. Archibaldo me envía para que hable contigo.
-No tengo nada de que hablar, al fin lo veo claro. Martina, mi esposa... Necesito respuestas.
-Chico, confía en el viejo Haddock. Me ha sacado de mi retiro en Gran Canaria para que hable contigo. Quiere ayudarte, como tantas veces hizo. Y yo también quiero ayudarte.
-¡Déjeme! Mis días de reportero trotamundos han terminado. Mi venganza comienzan hoy. Pagarán por lo que han hecho, empezando por esa rata infecta de Endaddinne Akass. No tendré piedad.
-Hijo, no tomes el camino equivocado... No es tu estilo.
-Por favor, capitán. Échese a un lado y no se interponga en mi camino. Y dígale lo mismo al capitán Haddock y a ese... Tornasol. Este viaje lo emprenderé solo con Milú, pues tal vez no tenga retorno.
Le puso una mano en el pecho al capitán Chester y lo apartó a un lado. Después se perdió por las escaleras, seguido de su fiel Milú.
Este foro es contagioso... ¡y hasta peligroso!
Cuidado con EL VIRUS CON COPETE.